Masa napolitana Vs masa romana

¿Sabías que en Italia hay dos tipos de masas para pizzas? Pues si señor@s, la napolitana y la romana.
Y hoy queremos contarte sus diferencias y sus secretos para que cada una sea tan peculiar.

Estate atento, porque si quiere convertirte en un experto y contar a tus amig@s de que va esta historia de las masas, lee…

PIZZA NAPOLITANA
Es considerada por muchos como el primer tipo de pizza que apareció en la gastronomía italiana, específicamente en Nápoles, y de la que han salido todas las otras. ¿Y porqué? Pues por la masa, su cocinado en horno de leña y sus ingredientes.

Conforme la Associazione Verace Pizza Napoletana, la masa ha de ser fina, jugosa y esponjosa en todos y cada uno de los mordiscos. Para estar en su punto, esta masa se debe plegar en el momento en que te la lleves a la boca.

PIZZA ROMANA
Sin embargo, esta masa es más fina que la napolitana, y además, lleva como ingrediente extra el aceite de oliva. Del mismo modo,contaros que el tiempo de fermentado es el doble que el de la napolitana, un día entero. Y por ello mismo, como conseguimos que su base sea más resistente, permite añadir más ingredientes.

Ahora a probarlas… ¡ya puedes clasificar que tipo de pizza estás comiendo!

¿La pizza se come con la mano o con cubiertos?

No hay duda, que la pizza por sus infinitas combinaciones de ingredientes es un plato cuanto menos entusiasta.
Múltiples tipos de masas e increíbles sabores, la pizza es un plato internacional, que cuenta con versiones propias según el país. Pero lo que parece que en principio solo tiene una versión es que la pizza se come con la mano, ¿verdad?

Pero…¿cual es la técnica apropiada? Nosotros somos de los que afirmamos que cada persona tiene sus propios truquitos.

Con la mano
Con esta anécdota empezamos a contaros las diversas costumbres que existen para comer la pizza.
Precisamente en Nueva York, la tradición manda que para ser un neoyorquino auténtico debes comerte la pizza con la mano y doblando la porción por la mitad. Se ve que la acelerada vida de la ciudad ha extendido esta técnica, comer más en menos tiempo.

A la gran mayoría nos gusta tomar un pedazo de pizza, haciendo equilibrio entre su tamaño y cantidad de ingredientes, y empezar a comer por el vértice. Este método es sin duda el más fácil y rápido.

Otro método, siguiendo con las manos, es poner la punta de la porción de pizza hacia dentro y luego doblarla a la mitad. Usando esta fórmula conservas todos los ingredientes adentro, evitando que se caigan por el camino hacia tu boca y puedes moderla más fácilmente.


¿Cuchillo y tenedor?

Los cubiertos, quizá no estemos acostumbrados, pero también juegan su papel importante en el ritual de la pizza.

Empezamos por lo más evidente, puede que la pizza no llegue a la mesa pre-cortada, pues para ello quizá los necesitemos.

Y ahora resulta que la pizza está a rebosar, quieres comerte todo sin dejar ni gota, pues haz filigranas con el tenedor y tu porción, o simplemente aguarda hasta el final y come la lluvia de ingredientes que cayó en el plato.

Pero claro que la pizza se puede comer como si fuera un solomillo de cerdo, solo que hasta para eso existen ciertas normas. En el caso de que la punta de la pizza se caiga hacia abajo o si aún está demasiado caliente y no podemos esperar, ahora sí, mejor usamos tenedor y cuchillo, porque según los expertos esto está justificado.

¿Y tú de que equipo eres? ¿Mano o cubiertos?

Bordes sí o bordes no. De la pizza… claro.

Dicen que nuestro comportamiento habla sobre quienes somos.
Hoy traemos un post interesante a cerca de varias cuestiones muy típicas.

1. Comerse el borde de la pizza Vs. Dejarse el borde de la pizza.
Veamos como eres según actúes.

– Si te comes el borde…
Eres una persona decidida, tradicional y fan incondicional de la pizza. Tanto que, de no ser porque la caja es de cartón, lamerías las esquinas de queso y tomate hasta sacarles brillo. Porque un pedazo de pizza no se acaba donde termina el queso, la masa es algo jugoso de lo que también se pude disfrutar, ¿no?

– Si te dejas el borde
Ups, entonces eres de los que hacen distinción entre la vida “con” y “sin” sabor. Eres una persona que sabe lo que quiere y va a por ello, dejando de lado toda distracción y disfrutando de cada pequeño detalle. La combinación de ingredientes y texturas te resulta tan sabrosa, que bien podrías considerarla un pecado capital.

AH!
Hay una tercera variante, muy curiosa también.
Hay una pequeñísima parte de la población, que se deleita con cada bocado de su suculenta y sabrosa pizza, dejando apartados todos y cada uno de los bordes, perfectamente cortados y alineados a un lado del plato para comérselos al final.
Quizá incluso con el toque de algún aderezo como salsas o algún otro ingrediente. Son pacientes y no les importa esperar para obtener su recompensa. Porque con la pizza, nada es suficiente.

¿Coincide con tu personalidad?
Déjanos un comentario en nuestro post.

¿Qué ingredientes lleva la masa de pizza?

Preparación tipo para masa de pizza

En un bol grande introducimos parte de la harina de fuerza de trigo. Dejamos unas 4 cucharadas de harina separadas para ir engordando la masa.

Con una cuchara hacemos un hoyo en el centro del bol y echamos la levadura disuelta en el agua.

Batimos con una cuchara de madera desde el centro hacia afuera y vamos poco a poco mezclando con la harina.

Añadimos el aceite de oliva virgen extra y la sal. Es importante que la sal y la levadura no entren en contacto directo para no tener problemas en el proceso de fermentación.

Seguimos removiendo lo que empieza a ser la masa, por ahora será una mezcla pegajosa pero firme.

Preparamos la zona donde vamos a amasar, por ejemplo la encimera de la cocina es perfecta.

Amasado de la masa de pizza y almacenamiento

  1. Llenamos la zona de la encimera de harina, sacamos la masa del bol y empezamos a trabajar la masa con las manos. Es muy importante el refinado de la masa para que quede más elástica y suba mejor.
  2. Para refinarla, debemos estirar la masa como un churro y retorcerla en espiral varias veces. Al final volvemos a juntar y amasar de nuevo durante unos diez minutos. Este es el truco que hace que la masa sea increíble.
  3. Después de esos 10 minutos, podremos manipular la masa con más rapidez, se irá quedando elástica y homogénea.
  4. La medida de harina correcta es “hasta que la harina no se pegue a las manos”, pero tampoco se debe de abusar. Yo en los ingredientes he puesto 1 kilo aunque en realidad empleé unos 100 gramos más. Todo depende de la harina pues no siempre vienen de moliendas iguales, ni el trigo es el mismo.
  5. Vamos tornando la masa en una bola. Cogemos el anterior bol y lo enharinamos. Introducimos la bola de masa en él. Tapamos el bol con un trapo de algodón durante unos 45 minutos- 1 hora.
  6. Para saber el tiempo que se debe dejar levar la masa, utiliza el siguiente truco: si la apretamos con un dedo y la masa vuelve a su posición original estará lista para preparar.